LA NATURALEZA
Muchas veces me he puesto a pensar ¿por qué Dios creó tantas cosas?, Y todas ellas son tan interesantes y nos habla de un Dios que se preocupó por detalles que a simple vista muchos de esos detalles no son percibidos, sino solamente en su contemplación. ¿Sabía, por ejemplo que cada copo de nieve, que es microscópico es diferente?, no hay uno igual al otro. ¿Qué en un desierto hay flores microscópicas?, que cada amanecer no es igual, y cada atardecer tampoco es igual. Ahora que hay tanta luz en las ciudades no nos dejan contemplar las hermosas noches estrelladas, pero cuando vamos a un lugar donde no hay energía eléctrica podemos contemplar un cielo cuajado de estrellas y la luna llena cual espejo que alumbra las oscuras noches, ¿no es simplemente maravilloso?

Si tiene mascotas en casa contémplelo detenidamente y descubrirá que hay detalles hermosos en cada uno, vea por ejemplo en un pajarito, las plumas no son de un mismo color, y cada una es de diferente tamaño, ¿los ha visto bostezar?, y es increíble pero tienen pestañas en los ojos. Un perro tiene cejas, pestañas y los bigotes no son adorno solamente, tienen el propósito de indicarles donde se encuentran, y a muchos les sirve de equilibrio. Los elefantes son seres extraordinarios, ¿sabía que son animales que tienen afectos por sus familiares y que lloran y extrañan a los de su manada si estos llegan a faltar? Y dónde dejamos el misterioso océano que nos brinda un universo de seres de brillantes colores, de todo tamaño y de toda forma. Los impresionantes corales de mil colores y los beneficios que nos proporcionan, porque ellos producen gran cantidad de oxigeno que nos sirven para sobrevivir. Los árboles que son tan diferentes unos de otros, y aunque sean verdes son de diferentes tonos, y sus hojas son diferentes unas de otras. Y hay de diferentes tamaños y unos nos dan flores con aromas deliciosos y otros nos dan los ricos frutos de diferentes colores y sabores y formas. Y los que no nos dan flores o frutos nos proporcionan el precioso oxígeno que nos ayuda a vivir.

La palabra de Dios nos revela Su carácter, pero su naturaleza no se queda atrás. Nos revela que es un Dios amante, y que no se mide para dar a conocer que se preocupa por nosotros. Si hasta los cabellos de nuestra cabeza están contados dice en su palabra en Mateo 10:30. Y me encanta lo que escribe Elena de White en su libro “El Camino a Cristo”: “Dios es amor”, está escrito en cada capullo de flor que se abre, en cada tallo de la naciente hierba. Los hermosos pájaros que llenan el aire de melodías con sus preciosos cantos, las flores exquisitamente matizadas que en su perfección perfuman el aire, los elevados arboles del bosque con su rico follaje de viviente verdor, todos dan a una testimonio del tierno y paternal cuidado de nuestro Dios y de su deseo de hacer felices a sus hijos.

Aprendamos a cuidarla puesto que todo está puesto en un equilibrio perfecto. Y ya estamos viviendo las consecuencias del maltrato a todo lo creado. Si no puedo sentir misericordia por lo creado, no la puedo sentir por nada. Fuimos creados para amar, compartir y servir. Si no hago esto no sirvo para vivir.